Continuamos con el artículo anterior sobre cómo elegir tu moto, enumerando y comentando los distintos factores o motivos por los que elegir uno u otro modelo de moto.
Sin duda, para algunos futuros propietarios, unos motivos serán de mayor importancia a la hora de elegir un modelo concreto de motocicleta, prioritarios frente a otros a los que les concederán un menor valor. En cambio, para otros el orden de prioridad será justo al contrario.
El mundo de la moto, sin duda, es algo emocional, algo que despierta pasiones en muchos de sus usuarios. Sentimientos de libertad, de independencia, de poder… rodean y envuelven el mundo de la motocicleta. Pero, ya tendrás tiempo de vivir ese subidón de emociones cuando la hayas comprado y uses tu moto.
Antes de eso, en el momento de la compra, mejor es ser objetivo y tomar las decisiones de manera serena y tranquila.
perfectamente podemos quedarnos paralizados, incapaces de decidir, de ver cuál será nuestra moto ideal.
En este artículo, tras mucho tiempo en mundillo de la moto, y tras haber conducido y probado muchos modelos, nos gustaría enumerarte varios puntos, argumentos o motivos que te ayuden en el proceso de elección de tu primera “máquina”. No nos proponemos crear un protocolo o cuestionario riguroso, infalible que le sirva a todo el mundo. Todo al contrario. Nos proponemos presentarte una visión distinta, original (Pero no por ellos menos acertada) de las principales motivaciones que nos llevan a elegir un modelo u otro.
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Estas motivaciones a la hora de tomar una decisión, son las siguientes:
5. Compra una moto para tu presente, para tu día de hoy. No para tus sueños de futuro.
Elige y compra una motocicleta que mejor se ajuste a ti y a tus capacidades (aptitudes, experiencia, capacidad…) de hoy, así como a tus planes del presente.
Si sueñas con dar algún día una vuelta al mundo en moto o cruzar África en solitario compra una moto válida para estos objetivos cuando inicies los preparativos del viaje. No elijas un modelo que, a cambio de la posibilidad de llevarte algún día a uno de esos destinos, te suponga un sacrificio o te genere algún tipo de penalización en tu momento presente.
Por ejemplo, elegir una moto con una capacidad de depósito ideal para cruzar las grandes sabanas africanas, pero que en el uso diario que le vas a dar te va penalizar por su excesivo peso. O una moto ideal para correr un Rally por el desierto pero que para el uso principal que le vas a dar (antes de tener la experiencia para ir a un rally en el desierto), es demasiado alta para ti o demasiado incómoda para tu acompañante o pasajero.
Es bueno tener sueños, y perseguirlos, pero cuando llegue el momento de cumplirlos, ya buscarás el material adecuado. No te engañes con una moto preparada para poder llegar a sitios a los que nos vas a ir… al menos de momento.
6. No te obsesiones con característica y especificaciones técnicas.
A la hora de comprar una moto, te en cuenta que todas las motos del mercado cumplen con unos muy amplios estándares y márgenes de calidad y equipamiento; y a poco que afines la compra (elegir una moto Trail para hacer Trail, una moto de Touring si tu objetivo es hacer grandes viajes por carretera, etc…) tendrás una máquina entre tus manos (perdón, entre tus piernas…) cuyos límites están seguramente, más allá y más lejos de tus capacidades.
No te obsesiones con elegir, entre las opciones disponibles, aquel modelo con el máximo recorrido de suspensión por miedo a hacer tope con la misma y que eso te suponga un gran inconveniente. Con toda seguridad harás cientos, miles de kilómetros antes de hacer tope por primera vez y lo más probable es que esto pase desapercibido.
Hay personas que eligen modelos, a la hora de comprar una moto, con el máximo recorrido de suspensión del mercado (los fabricantes parecen hacer entrado en una competición sobre este tema, a ver quién ofrece mas!!!…) y luego, para poder llegar a suelo de forma mínimamente aceptable, bajan la altura de la moto con bicicletas y ajustes que terminan por modificar la geometría original concebida en el diseño de la moto.
Hay personas que cambian los neumáticos de la motocicleta en el mismo concesionario, antes de haberla estrenado, sin haber usado los que traía de serie. Otros gastan grandes sumas de dinero adquiriendo la marca y el modelo más capaz, más sofisticado y desarrollado del mercado, cuando, probablemente, jamás lleguen a darle un uso tan especializado y extremo.
Detrás de cada motocicleta que pasa a producción y después a comercialización hay un concienzudo equipo de ingenieros así cientos de horas de trabajo y pruebas. Los márgenes y las posibilidades que te ofrece esa moto de gama media que estás mirando están muy por encima de tus habilidades como piloto, así que puedes estar tranquilo con tu elección.
7. Compra una moto de un modelo como puerta de entrada
El sector de la motocicleta vive un auténtico boom al día de hoy. Las marcas y los modelos se multiplican, las ventas aumentan un trimestre tras otro, el mercado de segunda mano también está en auge y goza de una buena salud…
Cuando vayas a comprar una moto, elige un modelo asequible, bajo una óptica amplia, que te permita entrar y conocer el mundo de la moto. Después, pasado un tiempo, podrás vender tu moto y comprar otra con la que afines más, desde tu experiencia, y que se acerque a tu moto ideal.
Nadie mejor que tú para saber cómo tiene que ser ésta, qué tiene que incluir que no tenía tu anterior moto (qué es ahora irrenunciable para ti) y qué funciones o capacidades no necesitas y por lo tanto no tienes que volver a pagar por ellas.
No dejes que otros, con sus consejos siembre subjetivos, basados en su experiencia, la cual está unida a sus gustos y creencias, miedos y limitaciones, elijan o condicionen la elección de tu moto.
8. Una vez la haya elegido… Disfrútala!!
Recuerda que al motorista lo hacen los kilómetros, las rutas y los días de moto.
Existen un gran número de usuarios que sólo sacan sus monturas de manera ocasional, para un evento, o para una fecha señalada. Se pasan meses sin utilizar la moto, que acumula polvo y descarga la batería en garaje.
Quizás sean esos los propietarios que se equivocaron al elegir sus motos a la hora de la compra. Quizás eligieron motos muy grandes y pesadas que en el día a día les cuesta mover. Seguro optaron por máquinas quizás deslumbrantes pero que se alejan de una moto que podamos usar a diario. Tal vez se dejaron llevar por sueños de viajes y aventuras y eligieron una compañera de dos ruedas ideal para realizarlos y ahora que no se cumplieron esos sueños y aventuras su moto, ideal solo para eso, pasa infinitas temporadas tapada y olvidada en el garaje.
Compra una moto que puedas vivir y disfrutar ahora, a tope, sin pensar en el futuro, elegida por ti, siguiendo tu criterio (y tu corazón), y disfrútala haciendo miles de kilómetros…
Y bienvenido al maravilloso mundo de la motocicleta…